Las pensiones contributivas se consideran rendimientos del trabajo, por lo que sus beneficiarios tienen que prestar especial atención a los cambios que trae consigo la campaña de la Agencia Tributaria en 2023.
Alejandra Suárez
Linkedin: alejandra-suárez-gallego-8121a3184Graduada en periodismo y apasionada del mundo de la comunicación. Empecé colaborando en medios deportivos y, más tarde, pasé a escribir sobre cultura en Hoy Magazine. También he tenido experiencia en televisión local y en Madridiario. Durante cerca de dos años, trabajé en El Adelantado de Segovia. Ahora, formo parte del equipo de Audiencias de HENNEO como redactora SEO y Social Media del diario económico La Información y otras cabeceras del grupo.
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Un Tribunal Médico es el encargado de determinar el grado en el que se reduce o anula la capacidad laboral de un trabajador y, en base a ello, la Seguridad Social decide si otorga o no la prestación social.
Los cambios en el sistema de pensiones impulsados por el Ministerio de Seguridad Social afectan a cuestiones como la edad de jubilación, la cotización o el método de cálculo de la prestación.
En 2023, la edad ordinaria de jubilación para poder recibir íntegra la prestación contributiva se ha fijado en los 66 años y cuatro meses, y en los 65 si el periodo de cotización es mayor de 37 años y nueve meses.
Los asalariados, autónomos o desempleados que soliciten el cheque hasta el próximo 31 de marzo deben cumplir una serie de requisitos para poder recibir la prestación que gestiona la Agencia Tributaria.
En 2023, las cuantías de la prestación de ayuda a la infancia se han revalorizado un 8,5%, y de esto pueden beneficiarse las familias con bajos recursos y menores a cargo que cumplan una serie de requisitos.
La ayuda para la compra de alimentos pueden solicitarla desde el 15 de febrero los asalariados, autónomos o desempleados inscritos en las oficinas de empleo que no reciban otras prestaciones sociales.
El Gobierno de España estima que más de medio millón de estudiantes tendrán derecho a los 2.500 millones de euros que se destinarán a las prestaciones, para las que se ha aumentado la inversión un 70%.
El subsidio por cotización insuficiente supone el 80% del IPREM, cuyo aumento entró en vigor el 1 de enero de 2023, después de que el Gobierno de España así lo aprobara en los nuevos Presupuestos Generales.
Desde el 1 de enero, la prestación contributiva para las personas que quedan viudas tras el fallecimiento de su marido o esposa registra una subida del 8,5%, pero, para recibirla, se deben cumplir unos requisitos.
Las personas que pierden su trabajo y están cerca de la edad de jubilación, pero aún no pueden cobrar una pensión, ni tienen derecho a la prestación por desempleo, pueden recibir la ayuda de 480 euros al mes.
La prestación puede ser suspendida, extinguida por revisión de la incapacidad declarada o por reconocimiento de la pensión de jubilación, o eliminada por el fallecimiento del beneficiario.
En los próximos cuatro meses comenzará el proceso selectivo de la que es una de las ofertas de empleo público más grandes de la historia de España, que está previsto que se resuelva en un año.
Quienes estén en paro y cumplan ciertas condiciones pueden cobrar el subsidio por insuficiencia de cotización, gestionado por el Servicio Público de Empleo Estatal y cuya duración máxima es de 21 meses.
Con el sistema de cotización que ha entrado en vigor este año, los trabajadores por cuenta propia deberán seleccionar una cuantía que venga determinada por la estimación de ingresos netos que tengan cada mes.
La revalorización de las pensiones contributivas que son gestionadas por la Seguridad Social aumenta en un 8,5% la prestación que pueden recibir los hombres y mujeres cuyo cónyuge haya fallecido.
La empresa de titularidad pública abrió el plazo de devolución el pasado 9 de enero, pero el método de pago varía en función de si los usuarios depositaron el aval en metálico o lo hicieron con tarjeta.
La Seguridad Social debe determinar el impacto de la dolencia en las capacidades o incluso autonomía personal del trabajador, y decidir si le concede o deniega la pensión por incapacidad permanente.
La revalorización del 8,5% en las pensiones contributivas aumenta el porcentaje que los jubilados deben tributar por IRPF, cuyo tipo varía desde el 9,5% para la prestación mínima, hasta el 18,5% para la máxima.
En ciertos casos, el deudor puede solicitar una prórroga si no logra pagar en el tiempo establecido, aunque deberá cumplir con los plazos y condiciones acordados para evitar que se proceda a la ejecución.
La revalorización en función del IPC del 8,5% recogida en los Presupuestos Generales del Estado para las pensiones contributivas se aplica al importe mensual que tuviera la prestación a 31 de diciembre de 2022.
Los trabajadores que, por accidente o enfermedad, no pueden realizar su labor habitual, pero sí desempeñar otros puestos, tienen la posibilidad de solicitar hasta seis subsidios al SEPE.
La cuota reducida es una de las principales novedades para los trabajadores por cuenta propia que entró en vigor el pasado 1 de enero de 2023, y que se mantendrá durante los próximos tres años, hasta 2025.
La mayoría de sectores del mercado laboral cuentan con convocatorias, pero no todas son igual de complejas, algo que viene determinado por los requisitos que exigen, el temario o el número de plazas.
Los Presupuestos Generales del Estado para este año contemplan un aumento del 8,5% de las pensiones por incapacidad permanente, con el objetivo de salvaguardar su poder adquisitivo y combatir la inflación.
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