El sindicato recuerda que en el sector ya se han destruido desde 2019 más de 500 puestos, a los que se añaden los asociados a la reversión al Estado de las autopistas AP-7 y AP-2 cuando acabe su concesión.
Florentino Pérez, presidente de ACS, quiere participar en la compra de ASPI, la firma que gestiona estas carreteras. El objetivo de ACS es crear un gran grupo de infraestructuras europeo vinculado a autopistas.
En el negocio de concesiones, ACS se encuentra centrada en el proceso de venta de ASPI con la vista puesta en crear un grupo de concesiones de autopistas con los 5.000 millones de la operación con Vinci.
La firma ya señaló a mediados de febrero que la oferta del estado italiano para comprar su filial estaba por debajo de sus expectativas y lejos de los al menos 11.000 millones que estimaban los accionistas.
Gracias a los fondos recibidos con la venta de gran parte de su negocio industrial a la francesa Vinci.
El proyecto incluye más de 800 vanos de construcción de puentes, 4.500 vigas de hormigón, 15.000 toneladas de vigas de acero y 550.000 metros cuadrados de tableros de puentes.
Solo las carreteras que enlazan París y Marsella, Milán y Nápoles y Bodo y Oslo son más caras que la española, con unos costes de 58, 56 y 50 euros.
La compañía de Rafael del Pino se hará cargo de las obras de reconstrucción de un tramo de 7,4 kilómetros que deberá finalizar antes de 2025.
El grupo italiano de infraestructuras y concesiones ha acusado la pandemia en sus principales vías de ingresos, que cayeron un 29%, hasta los 8.284 millones de euros.
En el último año el tránsito de vehículo cayó un 21%, aunque la compañía, que pagará un dividendo de 601 millones en abril, destaca la diversificación internacional como contrapeso.
La primera garantía de explotación cuya incautación se ha solicitado corresponde a la Autopista Madrid-Toledo AP-41, que fue la primera en declararse en concurso de acreedores.
La constructora española ganó 574 millones de euros al cierre del pasado ejercicio, impactada por la caída de 280 millones de la aportación de su filial de autopistas respecto a 2019
La empresa figura como demandada, en calidad de accionista de su participada Irasa, en el litigio por la autopista de peaje, en el que los fondos acreedores reclaman 551,5 millones de euros.
El mercado nacional pasará a convertirse en un activo residual para la firma en manos de Florentino Pérez y los Benetton después de que Fomento recupere el control definitivo de las autopistas en agosto.
El banco ha alertado del impacto a corto plazo de la caída del tráfico por la Covid y la posibilidad de que la autoridad canadiense construya una vía paralela a la autopista, propiedad en un 43,23% de la española.
En la actualización tarifaria no se incluyen las autopistas gestionadas por Seittsa, para las cuales siguen vigentes las tarifas aprobadas por el Acuerdo del Consejo de Ministros del 14 de diciembre de 2018.
El Gobierno respira en la semana clave de las votaciones en el pleno de la Cámara Baja para sacar adelante sus cuentas para 2021. El día más decisivo será el jueves, cuando no se puede permitir ningún problema.
El gobernador del Estado de Nayarit, Antonio Echevarría, pidió que "se atienda y apoye a las víctimas lo antes posible" mientras que la Guardia Nacional ordenó el cierre de la carretera.
La empresa española de promoción y gestión de infraestructuras y energías renovables se hará cargo de la ampliación de una sección de la autopista más importante del país.
La última vez que la compañía de autopistas acudió al mercado fue el pasado mes de junio, con una emisión de bonos por 900 millones.
Las medidas de restricción a la movilidad han provocado que el grupo de la compañía dedicada a la gestión de autopistas haya hecho una contribución negativa de 8 millones de euros a sus resultados.
Tras los acuerdos alcanzados durante el verano con el Gobierno del país, que pretende que todos los activos pasen al control del Estado.
El grupo que preside Rafael del Pino se anota un impacto negativo de 222 millones por las pérdidas del aeródromo, que se suma a la provisión en el negocio constructor que realizó en el primer trimestre.
Los usuarios que circulaban correctamente se vieron obligados a realizar maniobras evasivas para evitar la colisión con el mismo, algo por lo que se le imputa un supuesto delito contra la seguridad vial.
Los Benetton, a través de Edizione, controlan de forma directa el 16,5% de Cellnex y el 30% de Atlantia, aunque ahora se verán diluidos en la concesionaria de autopistas tras la entrada del Estado italiano.
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