La vicepresidenta primera en funciones, Nadia Calviño, ha confirmado que el procedimiento para la condonación de parte de la deuda a las comunidades autónomas, que el PSOE y ERC han pactado en el marco del acuerdo para la investidura de Pedro Sánchez, es una mera transferencia entre administraciones que, si bien tiene impacto contable, no afectará a la posición de España en los mercados financieros. Esto implica que no elevará la deuda del conjunto del país, que está inmerso en un proceso de consolidación con el objetivo de situarla a cierre de este año por debajo del 110% del PIB (frente al 113,2% al que la ratio despidió el pasado ejercicio).
Durante su participación este viernes en unas jornadas sobre retos presupuestarios y reglas fiscales organizadas por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), Calviño ha insistido en que el objetivo de esta medida es que los territorios vuelvan cuanto antes a la disciplina de los mercados financieros y ha dejado claro que el trato será extensible a todas las regiones, estén participando o no de los mecanismos de financiación extraordinarios como el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA).
En este sentido, la 'número dos' del Gobierno en funciones ha garantizado la "igualdad de trato" a todas las regiones con este procedimiento, que "también es "extensible a las comunidades autónomas gobernadas por el PP". Lo ha puntualizado Calviño tras mostrarse extrañada por la reacción tan rápida de varios gobiernos autonómicos populares cuyas regiones vienen arrastrando un elevado nivel de deuda desde hace décadas que viene lastrando y dificultando su vuelta a la disciplina de los mercados financieros.
En virtud del acuerdo entre PSOE y ERC, el Estado asumirá 15.000 millones de euros de la deuda que la Generalitat de Cataluña tiene contraída con el FLA. Esta cantidad equivale a alrededor del 20% de la misma, que es el porcentaje que estaría afectado directamente por el ciclo económico. El Estado fijará posteriormente el porcentaje afectado en cada una de las autonomías que quieran acogerse también a este mecanismo de condonación.
Tras descartar que la medida vaya a tener un impacto sobre el endeudamiento nacional, Calviño ha recordado que el Estado ha tenido que asumir 35.000 millones de deuda de la Sareb por el rescate bancario solicitado en 2012, y que esto sí ha tenido un efecto en la deuda de España. De no haberlo hecho, la ratio de deuda sobre PIB habría cerrado por debajo del 110% el año pasado y ahora estaría cerca del 105%, según sus cálculos.
Entrada de la SEPI en Telefónica
Por otra parte, Calviño, ha evitado pronunciarse sobre la posibilidad de que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que depende del Ministerio de Hacienda, pueda entrar en el accionariado de Telefónica después de que Saudí Telecom Company (STC) revelase que ostenta una posición del 9,9% del capital de la compañía. Con todo, sí que ha dejado claro que "un Gobierno responsable tiene que analizar todas las operaciones".
El movimiento que la SEPI estudia, que serviría para equilibrar la presencia en el capital de STC y reforzar al mismo tiempo la españolidad de la operadora, tendría un coste de alrededor de 1.000 millones de euros, según la cotización actual de la compañía en el Ibex 35. "Me remito al comunicado que ha hecho la SEPI", ha incidido Calviño, que ha recordado que la empresa capitaneada por José María Álvarez-Pallete es "muy estratégica, si no la que más".
