El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dejado este jueves la puerta abierta a una revisión del impuesto extraordinario a las energéticas a la vista de la vuelta a la normalidad de los precios de la electricidad, aunque sean más altos que hace dos años, y ante la necesidad que tienen las grandes empresas del sector de realizar inversiones en nuevos proyectos renovables como el hidrógeno verde o las infraestructuras de apoyo a la industria. Sánchez ha recogido el guante de empresas como Repsol, que habían llegado a poner en duda las inversiones millonarias comprometidas en ese ámbito y ha admitido que hay que revisar la situación, sobre todo para poner facilidades a la reindustrialización del país y a la conformación de un sector energético que, por primera vez en su historia, tiene la oportunidad de convertirse en un hub energético europeo.
Las palabras de Sánchez en una entrevista en el programa Espejo Público, de Antena 3, secundan las que ya apuntara la ministra Teresa Ribera esta semana desde la COP28 y se producen después de la gran presión que han mantenido las compañías del sector para hacer ver al Gobierno las necesidades de inversión que tiene el reto energético y la necesidad de tener una mayor estabilidad jurídica que apuntale ese tipo de procesos y abra la puerta a la entrada de nuevos fondos. La propia Comisión Europea hizo público un informe la semana pasada en el que advertía que las condiciones sobre el mercado energético y la formación del precio de la luz en Europa ya no eran las que había cuando surgió el conflicto con Ucrania y la presión del suministro ruso de gas y petróleo.
El presidente del Gobierno hizo un repaso de los retos económicos que tiene la economía española, el mismo día en que la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, preside la reunión del Ecofin en Bruselas de la que debieran salir dos cuestiones clave para la UE y para España: por un lado, un acuerdo base sobre las reglas fiscales que deben cumplir los socios una vez pasada la crisis energética y en pleno parón económico; y por otro lado, testear los apoyos con que cuenta la propia Calviño para ser la nueva presidente del Banco Europeo de Inversiones (BEI), el próximo mes de enero.
Calviño, camino del BEI
Pese a la pérdida personal y profesional que supone que Calviño salga de España, Sánchez considera que sería una gran noticia para España tenerla en el BEI, que es la entidad que va a vehicular todas las inversiones industriales de la UE en los próximos años, en pleno reparto de los créditos de la UE para la recuperación. El presidente reiteró que ya tiene decidido su relevo, si bien no dio pistas sobre el nombre -"puede estar dentro o fuera del actual Gobierno", dijo- y se mostró seguro de que España se mantendrá en la senda fiscal que mande Europa, con una previsión de déficit algo por encima del 3% el año que viene y la deuda en el nivel del 106% del PIB, por debajo del dato actual, a pesar del incremento en términos absolutos que ha sufrido, que se compensa con el aumento del PIB de estos años por encima de la media europea.
Reforma del subsidio por desempleo
Por otra parte, Sánchez afirmado este jueves que las diferencias entre los ministerios de Trabajo y de Economía sobre la reforma del subsidio por desempleo se resolverán haciendo la reforma que marque el "sentido común". El presidente ha explicado que esta reforma atenderá a dos planteamientos: dar cobertura a los menores de 45 años, que ahora mismo carecen de ella, y reforzar todos los sistemas de formación y de recualificación de los parados mayores de 50 años para que puedan volver a incorporarse al mercado de trabajo.
En relación a la subida de los precios de la vivienda, con un alza del 11% en el caso de la obra nueva, Sánchez ha señalado que la Ley de Vivienda lleva pocos meses en vigor para "revertir una dinámica que viene de hace muchos años". El presidente ha afirmado que el acceso a la vivienda es la principal preocupación y fuente de desigualdad de España, pues el 70% de la desigualdad en muchas ocasiones se debe a la imposibilidad, sobre todo de la gente joven, de poder acceder a una vivienda.
. "Creo que lo relevante es no hacer como hizo Aznar cuando gobernaba este país, que aprobó una Ley del Suelo que liberalizaba todo el territorio"
"Por tanto, tenemos que reforzar el parque público de vivienda. Tenemos que hacer, por ejemplo, como se instaura en la Ley de Vivienda, que el 60% de todos los desarrollos urbanísticos en nuestro país sean de vivienda pública, de vivienda accesible para la gente joven", ha indicado. Sánchez ha recordado que hace unos meses se pusieron en marcha los avales del ICO para que los jóvenes puedan acceder a una vivienda, pero ha insistido en que las políticas desplegadas "necesitan tiempo para asentarse y consolidarse". "Creo que lo relevante es no hacer como hizo Aznar cuando gobernaba este país, que aprobó una Ley del Suelo que liberalizaba todo el territorio y que sirvió para la especulación de la vivienda en nuestro país", ha argumentado.
Comisión de trabajo con Feijóo
En el plano más político, Sánchez ha confirmado que tiene previsto proponer al líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, una "comisión de trabajo" para alcanzar un pacto y renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), además de tratar una nueva financiación autonómica y la reforma del artículo 49 de la Constitución.
El presidente del Gobierno ha considerado que es importante que los dos grandes partidos -PSOE y PP-, trabajen con un "horizonte de acuerdo" en el "inicio de la legislatura" sobre estos tres asuntos. Sobre a la posición del PP, que se muestra escéptico sobre la posibilidad de llegar a algún acuerdo con el Ejecutivo, Sánchez ha respondido señalando las diferencias que hay entre Gobierno y los 'populares'. Según ha indicado en las dos semanas que lleva trabajando el Gobierno, ya ha aprobado varias medidas como la Ley de Paridad, la negociación de la subida del Salario Mínimo Interprofesional y el incremento de la ayuda humanitaria a Gaza.
