El empresario Javier López Madrid ya tiene nuevo abogado en el caso Púnica. Tras la renuncia a su defensa del bufete Business&Law, el que fuera consejero de OHL se ha puesto en manos de Manuel Ollé. Se trata de un letrado experto en derecho penal internacional que ha litigado también en muchas causas instruidas en la Audiencia Nacional. De hecho, entre sus triunfos, destaca la reciente condena a 133 años de cárcel para el exviceministro de El Salvador Orlando Montano por el asesinato del teólogo Ignacio Ellacuría y otros cuatro jesuítas españoles en dicho país en 1989.
De este modo, y según figura en una providencia del juzgado a la que ha tenido acceso La Información, Ollé coge las riendas de la defensa de López Madrid casi en tiempo de descuento de este procedimiento penal que comenzó a investigarse hace cerca de siete años. Anticorrupción atribuye al empresario el reparto de mordidas junto con el presunto cabecilla de la trama Púnica, Francisco Granados, y el constructor confeso David Marjaliza, que serían resultado del amaño en adjudicaciones de las obras para la construcción de infraestructuras de Metro Madrid. En esta misma causa también estaba implicado su suegro, Juan Miguel Villar Mir, si bien la Audiencia Nacional archivó su causa por falta de indicios.
A ambos les defendía el mismo letrado, Carlos Domínguez, si bien éste comunicó al juzgado hace unas semanas que dejaba de ejercer la defensa de López Madrid tanto en esta causa como en Lezo, relativa a irregularidades en los contratos del Canal de Isabel II. En este procedimiento se le investigó por el presunto pago a exdirectivos de la empresa de aguas de una mordida de 2,5 millones de dólares para adjudicarse el proyecto de tren de Navalcarnero. De nuevo la Fiscalía dejó fuera al expresidente de OHL por falta de pruebas pero consideró que había indicios para actuar contra su yerno por el desvío en el año 2007 de estos pagos desde unas cuentas de OHL en México. Anticorrupción pide para él seis años de prisión por estos hechos.
Experto en Derechos Humanos
En esta nueva etapa López Madrid se pone en manos de un experto en derecho internacional. Manuel Ollé, que también le defenderá en el caso Lezo, es reconocido no solo por su labor como penalista sino también como profesor de Derecho Internacional en la Universidad Complutense. En el marco de esta especialización ejerció la defensa de Hervé Falciani, el informático que destapó una lista de 130.000 evasores fiscales del banco suizo HSBC. Además de Ollé también le ha defendido el despacho Iocad, que dirige el exmagistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón. Se da la circunstancia de que ambos juristas tienen muy buena relación. En lo que a Falciani respecta, frenaron en varias ocasiones su extradición a Suiza -país que le reclama por filtrar los datos bancarios- y también que el Constitucional avalara la validez de su lista. El tribunal de garantías sentó un importante precedente con este asunto al admitir como prueba el documento bancario por su trascendencia.
Otro de los hitos en su carrera lo consiguió el pasado mes de septiembre, cuando la Audiencia Nacional condenó a 133 años de cárcel al excoronel salvadoreño Orlando Montano por el asesinato de cinco jesuítas españoles en 1989. El conocido como 'caso Ellacuría', cuya sentencia acaba de revisar el Tribunal Supremo, supuso un triunfo para este penalista que defendió a dos asociaciones en calidad de acusaciones populares. Con todo, también ha litigado en otras causas más propias de la Audiencia Nacional como la trama Gürtel. En este caso ejerció la defensa de Ricardo Costa bajo la dirección letrada del abogado Juan Casanueva. El que fuera secretario general del PP valenciano confesó en pleno juicio la supuesta caja 'b' de la formación popular y evitó de este modo la cárcel. El tribunal le condenó a cuatro años eludibles con el pago de una multa de 192.000 euros o trabajos comunitarios.
Otros frentes de López Madrid
Al margen de la trama Púnica o Lezo, Javier López Madrid también tiene otro frente abierto en la Audiencia Nacional. Recientemente, el magistrado del caso Villarejo -que es el mismo que instruye estas otras dos causas- le imputó por la presunta contratación del comisario en el marco del caso de la doctora Pinto. En este procedimiento le defiende el prestigioso abogado Javier Sánchez-Junco, letrado del Rey Emérito. Se trata de unos hechos que se remontan al año 2013 y que enfrentan en los juzgados desde hace mucho tiempo al empresario y la dermatóloga. De hecho, al margen de esta pieza de Tándem, el asunto se investigó en dos procedimientos separados en Plaza Castilla. En uno de ellos, la instrucción se concluyó y la magistrada le dejó al borde del banquillo junto con el comisario jubilado por agredir presuntamente a la doctora. La Fiscalía todavía no se ha pronunciado si bien la acusación popular pide para ambos 17 años de prisión.
El empresario, que fue condenado por el caso de las tarjetas 'black', compareció recientemente en la Audiencia Nacional por el caso Villarejo. López Madrid negó que contratara los servicios de espionaje del comisario jubilado aunque sí admitió que se acercó a él para frenar, según dijo, una campaña de hostigamiento y acoso de la dermatóloga. Incluso aportó más de un millar de folios de informes pertenecientes a las causas de Plaza Castilla relativos a informes policiales sobre este asunto y que vendrían a probar que le acosó a él y a su familia. La defensa de Pinto, que defiende la tesis contraria, se opuso a la incorporación de esos informes y expuso que en este procedimiento solo se investiga si hubo o no contrato del Grupo Cenyt.
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