Los inversores temen un golpe a la recuperación por el fuerte aumento de casos de Covid-19 en Europa y en EEUU y la constatación de las nuevas restricciones de movimiento en las principales economías.
El consejo de administración ha informado de que se ha aprobado la distribución de un dividendo a cuenta de 0,2727 euros por acción con cargo a los resultados de 2020, la misma cifra que el año pasado.
La eléctrica española complementa las posiciones tomadas en el país desde 2007 con una inversión total de 7.000 millones de euros en una compañía distribuidora pero regulada prácticamente al 100%.
Red Eléctrica se convirtió en octubre de 2019 en el principal accionista de Hispasat tras haber acordado con Abertis la compra del 89,68% de la empresa.
El avance del selectivo español ha estado sustentado en los posibles movimientos corporativos en bancos y 'telecos' ya que Telefónica se ha disparado un 8,32%.
Hereu sustituirá en el puesto de presidente de Hispasat a Rosario Martínez Manzanedo, quien accedió al cargo hace apenas un año en sustitución de Elena Pisonero.
El principal selectivo español, que el lunes registró fuertes avances, no ha logrado dar continuidad al rebote pero sí ha salvado los 6.700 puntos.
REE, participada por la SEPI en un 20%, está pendiente de la planificación de infraestructuras que debe aprobar el Gobierno.
Las bolsas europeas se derrumban ante la segunda oleada del Covid-19 que está obligando a endurecer las restricciones de movilidad y a la aplicación de nuevos confinamientos en diversas regiones.
El selectivo español, con la apertura alcista de Wall Street, ha intensificado sus avances aunque se ha quedado algo rezagado este miércoles frente a Europa.
La posible fusión entre Bankia y Caixabank abre el telón para la ansiada consolidación en el sector y dispara la volatilidad de los bancos del selectivo.
Tras su paso por Red Eléctrica, retoma ahora su actividad en LLYC para seguir impulsando el área de Contexto Económico.
Este nuevo registro supone un incremento del 0,6% respecto al anterior récord, anotado un día antes, que a su vez supuso un aumento del 0,5% sobre el máximo anterior alcanzado el 21 de junio.
Las bolsas europeas cierran al alza mientras el mercado español se desmarca a la baja ante un contexto marcado por los rebrotes del Covid-19 y por la 'guerra tecnológica' entre EEUU y China
La Bolsa europea cierra sesión, semana y mes con descensos guiados por la tormenta de pérdidas en los resultados corporativos del primer semestre, pero con el retrovisor puesto en la debacle macroeconómica.
Los planes del Gobierno para la transición energética, las inversiones en infraestructuras y el nuevo marco de retribución marcan el camino de la empresa hasta 2026.
Las bolsas europeas completan una jornada con dudas, centradas en la nueva ronda de resultados corporativos en España con Bankinter o Repsol, y en Europa con Daimler y Unilever
Las bolsas europeas llegan al ecuador semanal con las primeras grandes cifras empresariales sobre la mesa, entre ellas, las de Iberdrola, Naturgy, Cellnex o Logista han rendido cuentas.
Endesa y la Consejería de Transición Ecológica del Gobierno de Canarias han informado del corte eléctrico que afecta a cerca de 950.000 personas.
La inversión prevista en interconexiones internacionales entre 2021 y 2026 se sitúa en 759 millones; la CNMC cuestiona los planes de la compañía que preside Beatriz Corredor.
Los mercados de todo el mundo permanecen atentos a la expansión del coronavirus y temen que la actividad no pueda reactivarse al ritmo esperado si hay nuevos cierres para atajar la pandemia.
Las instalaciones de Endesa, Iberdrola y Naturgy no inyectarán energía a la red a partir del 30 de junio aunque el proceso administrativo de cierre se prolongará durante meses.
Las eléctricas, el 'refugio' para muchos ante los brotes de volatilidad por la Covid-19, retribuirán a sus accionistas con altas rentabilidades en las próximas semanas.
El grupo tiene que concretar sus planes para la compañía de telecomunicaciones Hispasat, adquirida en la época de Sevilla por 933 millones.
Las grandes compañías distribuidoras quieren que el Gobierno elimine el tope de inversión anual en el sistema eléctrico que se retribuye desde el recibo de la luz.
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