Negociación final de los Presupuestos

El Gobierno se abre a crear un impuesto a ricos presionado por Podemos y ERC

La coalición se inclina por repetir el bloque de la investidura con el voto favorable de Bildu a la espera de que el Supremo decida sobre el tercer grado los presos. Arrimadas no estará en el bloque de los 198.

Los vicepresidentes del Gobierno, Pablo Iglesias y Nadia Calviño
Codazos entre ERC y Cs por entrar en la foto final de los PGE junto al Gobierno
Agencia EFE

Los Presupuestos van de 'codazos'. El proyecto de ley empezó con un choque entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias y está viviendo una carrera entre dos bloques por entrar en la foto final. A un lado está ERC y EH Bildu, con la participación del PNV; y al otro está Ciudadanos, que continúa negociando con Moncloa y el Ministerio de Hacienda poder entrar en un acuerdo final. En el Gobierno también hay división y diferentes preferencias entre los ministros. Incluso hay trabajo en la sombra. Lo que está claro es que en la votación de enmiendas parciales del próximo jueves no estarán los 198 diputados que auparon al Ejecutivo a superar el primer trámite de las enmiendas a la totalidad.

La vía de ERC (y Bildu) ha ganado enteros en las últimas horas. El Gobierno se ha comprometido con los republicanos a un "preacuerdo" inicial con medidas de calado. Ampliar la moratoria del pago de las cuotas de autónomos hasta marzo del año que viene; crear un comité bilateral para estudiar la futura reforma fiscal; poner en marcha un grupo de trabajo para definir un nuevo impuesto a las grandes fortunas (el anhelo de Unidas Podemos) y los cambios necesarios para acabar con el 'dumping fiscal' que, a juicio de ERC, lleva a cabo la Comunidad de Madrid; un acuerdo sobre las becas, que supone la liquidación de la deuda del ministerio con la Conselleria de Educación desde 2005; y el "fin del control [reforzado] financiero del Estado a la Generalitat". Se trata del "fin del 155 financiero aplicado por Montoro y Rajoy", anunció Rufián añadiendo que "habrá más" en los próximos días.

Es la primera vez que el PSOE firma un "preacuerdo" en estos términos sobre un posible impuesto a los ricos. El pasado mes de mayo había rechazado una propuesta de Unidas Podemos para crear una tasa especial a las grandes fortunas dentro de la Comisión para la Reconstrucción Económica y Social del Congreso de los Diputados. En esta ocasión hay un avance. Fuentes de Hacienda explican que podría ser un nuevo impuesto o una reforma del actual Patrimonio. Se decidirá en esa comisión en ciernes. En el acuerdo de coalición la mención era: "Se estudiará la fiscalidad de las grandes fortunas al objeto de que contribuyan a un sistema fiscal más justo y progresivo".

Sobre la mesa ya está la citada propuesta de Unidas Podemos. Según ese plan del partido morado, el impuesto a los ricos que plantean gravaría con un 2% para patrimonios netos a partir de 1 millón de euros, con un 2,5% a partir de 10 millones, con un 3% a partir de los 50 millones y con un 3,5% a partir de los 100 millones. La vivienda habitual hasta 400.000 euros quedaría exenta. Este impuesto no podría bonificarse por las comunidades autónomas y permitiría aumentar la recaudación en torno a un 1% del PIB (unos 11.000 millones de euros). Sustituiría, además, actual Impuesto de Patrimonio y afectaría a los patrimonios superiores a un millón de euros. Sería, además, progresivo, "de forma progresiva, de forma que la mayor parte del impuesto recaiga sobre los 1.000 patrimonios más altos", aseguran desde el partido.

Hay que recordar que ERC había planteado una enmienda a los PGE para establecer una cuota fija estatal del impuesto de Patrimonio, que hoy está cedido a las comunidades autónomas, de forma que el mínimo nacional tenga que ser abonado en toda España. Ello tendría efectos inmediatos en la Comunidad de Madrid, que lo tiene bonificado. El Gobierno regional reaccionó inmediatamente asegurando que se estaba "produciendo una auténtica agresión a los madrileños que el Gobierno de la Comunidad de Madrid coloca en el máximo nivel de importancia". Esta maniobra ha quedado descartada tras el preacuerdo con ERC de este martes.

El tercer grado de Junqueras y los presos

Avances hay pero lo anunciado ayer por Rufián es un mero "preacuerdo" y en el Gobierno, al menos en la parte socialista, siguen sin fiarse de ERC. Desde las filas independentistas recuerdan que este jueves el Tribunal Supremo deberá decidir sobre el tercer grado de Oriol Junqueras y los presos independentistas, una jornada que consideran "clave" para la negociación presupuestaria. Ambos asuntos van unidos y no se descarta que finalmente los republicanos se caigan de la foto. Podemos está presionando para que el acuerdo final sea ese. Con ERC y EH Bildu y sin Cs. Los de Iglesias están trabajando para ello. 

Pero en otra parte del Gobierno se está cuidando la relación con el partido de Inés Arrimadas. Fuentes conocedoras de las conversaciones explican que la negociación con los naranjas sigue abierta. La protagonizan el secretario general de Presidencia, Félix Bolaños, y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Nacho Álvarez, el negociador de Unidas Podemos, no ha participado en los encuentros y acercamientos con los cargos de Cs.

Arrimadas ha dado orden de anclarse a la mesa negociadora hasta el final siempre que se vayan avanzando en las líneas naranjas. Este martes su portavoz Edmundo Bal confirmó que se siguen dando las condiciones para seguir en conversaciones con el Gobierno anunciando que "la fase del veto del Ejecutivo" ya se ha superado. Medidas arrancadas: la baja para padres con niños en cuarentena aunque no tengan PCR positiva o la tarjeta sanitaria única. Avances pero lo que está claro es que Cs no estará en una foto final con ERC. Sánchez tendrá que elegir en cuestión de una semana, que es cuando se debaten y votan las enmiendas parciales. El partido está abierto.

Mostrar comentarios