
Las bolsas europeas aceleran su retroceso este jueves en el inicio de la temporada de resultados corporativos con un ojo en las actas del BCE y otro en las cuentas empresariales del cuarto trimestre.
Las bolsas europeas aceleran su retroceso este jueves en el inicio de la temporada de resultados corporativos con un ojo en las actas del BCE y otro en las cuentas empresariales del cuarto trimestre.
La divisa europea recupera terreno en los mercados frente a la moneda estadounidense en previsión de que la Fed aminore el ritmo de subidas de tipos y el BCE vaya algo más allá con sus tasas.
El enfriamiento de las expectativas de tipos en EEUU tras el inflación provoca una subida durante la última semana del 4% para la divisa europea, algo que solo ha sucedido en cinco ocasiones en toda su historia.
El Banco Central Europeo viste su discurso de ambigüedad ante el riesgo de recesión, el fin de la barra libre de liquidez a la banca y la incertidumbre sobre el impacto de las subidas de tipos ya ejecutadas.
La divisa europea llegó a hundirse cerca del 7% en apenas nueve sesiones desde los máximos intradía que tocó el 9 de marzo en 1,1449
La divisa rusa se había estado hundiendo en una espiral vertiginosa desde la paridad con el dólar en 1993 pero se ha disparado como nunca antes tras marcar mínimos históricos de marzo con la guerra.
La divisa europea se ha convertido en otro problema para la inflación porque aumenta el impacto de los precios energéticos pero también en amortiguador de la desaceleración económica en Europa.