El Banco Sabadell y Solaria libran la batalla más cruenta dentro del Ibex 35 contra los bajistas en unos días en los que la operativa de los 'hedge funds' ha sido puesta bajo lupa a raíz de lo sucedido con la cadena de tiendas de videojuegos GameStop, a la que un grupo de inversores profesionales y una multitud de pequeños accionistas hicieron dispararse hasta un 2.700%, llegando a a provocar importantes pérdidas para los fondos de cobertura. Las posiciones afloradas en estos dos valores por las apuestas en corto suman a principios de febrero 110,10 millones de euros, de acuerdo con los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La banca ha sido tradicionalmente uno de los sectores más castigados de la bolsa española por las apuestas en corto. En el caso de la entidad que preside Josep Oliu, el ataque llega de la mano de dos 'viejos conocidos' que han entrado en pleno 'rally ' alcista del valor que, de hecho, se mantiene en positivo en el año con un alza del 12,6% (con una capitalización de 2.243 millones de euros). La posición corta más elevada en el valor la ostenta Samlyn Capital, del 2,08%, un nivel al que nunca había llegado un solo fondo de cobertura. A su vez, Citadel Europe ha elevado la suya en la entidad hasta el 0,5%.
Las dos suman 58,53 millones de euros. Citadel está presente además en otros valores del selectivo español como Cellnex Telecom (0,68%) o el hólding de aerolíneas IAG (0,57%). consiguió dos millones de euros de beneficio al cierre del ejercicio. El banco catalán ha conseguido sortear las pérdidas en el último ejercicio. Hace unos días comunicó al mercado un beneficio neto de dos millones de euros tras verse obligado a provisionar 2.275 millones de euros para hacer frente a un posible alza de la mora por la crisis de la Covi-19, por la ejecución de planes de reestructuración en España y Reino Unido y tras completar ventas de activos problemáticos.
Hasta la pasada semana Sabadell era junto a Bankinter el único banco español que se mantenía en verde en el año. El hecho de que el que fuera presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, vaya a conformar un Gobierno en Italia ha supuesto un revulsivo para el sector en bolsa, puesto que los mercados confían en que el romano sea capaz de estabilizar al país que cuenta, además, entre sus principales tenedores de deuda con las entidades españolas. De Draghi se espera que pueda impulsar la reforma del sistema financiero que tanto necesita la banca italiana.
Como segundo valor más castigado por los bajistas se encuentra Solaria, con un 1,7% de su capital en manos de los inversores en corto y, en concreto, del 'hedge fund' Helikon Investments Limited, que ha ido incrementando de forma progresiva su posición en la firma que capitanea Arturo Díaz Tejeiro desde el 0,910 que notificó el pasado 7 de diciembre. Los títulos de Solaria avanzan un 2,7% y ha conseguido esquivar los números rojos en el año gracias al avance de los últimos días.
La compañía fotovoltaica venía de ser una de las firmas que más caían del selectivo español después de que Goldman Sachs asegurase en enero que estaba "sobrevalorada", lo que también impactó de forma negativa en el resto del sector. La empresa, que se incorporó al índice español el pasado 19 de octubre en sustitución de MásMóvil, alcanza una capitalización de 3.033,8 millones de euros -desde entonces se dispara un 40,1%-. En contra de lo que sucediera a comienzos de año, los últimos informes de la banca de inversión sí han dado un espaldarazo al sector.
El 'truco' del valor con más posiciones cortas declaradas
Atendiendo a los registros de la CNMV, el valor con más posiciones cortas declaradas de la bolsa española es realmente Audax, con un 5,54% de su capital por valor de 51,57 millones de euros. Sin embargo, en su caso se trata de coberturas tras la macroemisión de deuda convertible llevada a cabo por la compañía energética. El pasado 23 de noviembre, su presidente, José Elías Navarro, comunicó a la CNMV que había prestado 40 millones de títulos (el equivalente entonces a más de un 9% del total de acciones del grupo) antes de que la empresa colocara 125 millones de euros en bonos convertibles 'verdes' para poder garantizar la operación.
Elías se cubrió del posible efecto dilución que pudiera tener la emisión de esos productos híbridos (tienen características típicas de la renta fija y también de los derivados sobre acciones) prestando dichos títulos a Goldman Sachs que, a su vez, se los alquiló a 'hedge funds', que han irrumpido en el capital de la energética para realizar la cobertura de los bonos convertibles.
